La reciente publicación por parte de la editorial Nórdica de uno de los relatos más célebres de Dorothy Parker, Una rubia imponente, así como de un volumen con una selección de su poesía editada por primera vez en castellano, ha vuelto a situar en la actualidad editorial la colosal figura de la narradora y periodista norteamericana.
Los relatos de Dorothy Parker (Nueva Jersey, 1893-1967) son un reflejo de su personalidad irónica y chispeante, del brillo de los felices años veinte en los que fue una de las plumas más reconocidas en semanarios como Vanity Fair, Esquire o The New Yorker. Su relato Una rubia imponente apareció no obstante en el Bookman Magazine bajo el título Big Blonde, y fue reconocido con el prestigioso Premio O. Henry en 1929.
Dorothy Parker es ya , por derecho propio, un clásico. También es una de las representantes de ese periodismo cultural ligero en apariencia pero con carga de profundidad basada en la mirada afilada e irreverente y en el sarcasmo. Sus relatos se leen con una sonrisa en los labios, pero al terminarlos el lector se encuentra con una sensación agridulce que concentra toda la tristeza y el hastío del tiempo y el espacio que le tocó vivir a la escritora, ambos llenos de contradicciones, personajes vacíos, falsa alegría, fiestas y mucho whisky para olvidar. Un mundo con un lado muy oscuro donde el ingenio y las frases con aguijón le ayudaron a moverse por una sociedad con mucha cáscara y poco fruto, que Parker disecciona en relatos con apariencia liviana pero que resultan tan demoledores como el retrato de la desgraciada vida de Hazel Morse, la protagonista de Una rubia imponente.
En este sentido, Regina Barreca, en su introducción a la edición inglesa de su narrativa completa, apunta que Dorothy Parker «describió los efectos de la pobreza, económica y espiritual, en la mujeres vulnerables a perpetuidad por culpa de la poca o nula educación recibida sobre el mundo real, entendiéndose por «mundo real» el existente fuera de la fábula del amor y el matrimonio.» (1)
Si sus historias mostraban un mundo agridulce tapizado de situaciones jocosas y absurdas, la vida real de la escritora estuvo caracterizada por problemas con el alcohol, intentos de suicidio y matrimonios fallidos. Su muerte, prácticamente en el olvido, no fue impedimento para dejar un irónico y último texto, «Excuse my Dust» (Perdonen el polvo). Una vida que puede resumirse en uno de sus poemas: «Bebe y baila, ríe y miente, ama toda la tumultuosa noche, porque mañana habremos de morir«.
Curiosidades sobre Dorothy Parker
- Su auténtico nombre fue Dorothy Rothschild. Sé casó, según ella, para perder su apellido judío
- A su muerte dejó su fortuna a Martin Luther King
- De ideología de izquierdas (fundó incluso la Liga Antinazi), durante la Guerra Civil visitó España y apoyó el gobierno de la República
- Fue la guionista de la película Ha nacido una estrella (A Star is Born, 1937)
Para acercarse al mundo de Dorothy Parker
Dorothy Parker, Una rubia imponente (traducción de Jorge Cano e ilustraciones de Elisa Arguilé), Madrid, Nórdica, 2013, 112 páginas.
Dorothy Parker, Narrativa completa, Barcelona, DeBolsillo, 2004, 635 páginas.
Dorothy Parker, Los poemas perdidos, Madrid, Nórdica, 2013, 408 páginas.
Entrevista a Dorothy Parker en el Paris Review.
(1) Dorothy Parker, Narrativa completa, Barcelona, DeBolsillo, 2004, páginas 619-620.
La imagen la tomé de NPR.