Acaba de publicarse en España el último (y esperado) libro de George R. R. Martin, Danza de Dragones (A Dance with Dragons, 2011) y su precio de venta ha despertado las iras de los seguidores de la saga. Ya he hablado en alguna ocasión del precio de los libros, en especial de las novedades, y de la barrera que supone para muchos lectores encontrarse con precios medios que rondan los 20-25 euros. En este caso concreto, la editorial Gigamesh ha puesto en venta el último volumen de la historia de los Siete Reinos a nada menos que a 46 euros en tapa dura y lo hará a 36 euros en blanda el próximo mes de julio. El impacto de esta cifra se eleva al conocer el precio de venta del libro en Estados Unidos: 21 dólares (17 euros) en tapa dura y 12,24 dólares (casi 10 euros) en tapa blanda, aproximadamente un 171% menos que en España. Y, además, según anuncia la propia editorial, de momento la versión para e-book no estará disponible. Unos datos para reflexionar.
La Información ha publicado un artículo que recoge la indignación de los seguidores de la saga de Canción de hielo y fuego o Juego de Tronos, como es ahora conocida por el gran público gracias a la popular serie de televisión de la HBO. En él se recogen las razones del editor de Gigamesh, Alejo Cuervo, para justificar la diferencia de precios a éste y al otro lado del Atlántico. Unas razones que su responsable de comunicación en las redes sociales está resolviendo con bastante torpeza, como recoge este artículo de 2conleche.com.
Los costes de producción en las editoriales suelen ser desconocidos para la mayor parte de los lectores y, en general, si no se es una gran editorial los márgenes de beneficio son bastante discretos. Editar un libro no es barato. Sin embargo, los responsables de Gigamesh no están haciendo un buen trabajo en transmitir a sus lectores las razones de este incremento en el precio del libro. Personalmente creo que el coste de producción de un libro como éste, aunque vaya «cosido con cuadernillos», como argumentan, es elevado. Se trata de un libro, además, que se anticipa como best-seller pero que, como sucede con el resto de volúmenes de la saga, realmente tiene una identidad de long-seller. Es decir, el libro va a vender y lo hará durante mucho tiempo. La moda impulsada por la serie de la HBO podrá pasar en unos años, pero los amantes de la literatura fantástica y de la obra de George R. R. Martin seguirán siendo igualmente legión como ya lo eran antes de la irrupción de Juego de Tronos en los canales de televisión.
¿Es justo aprovechar el tirón comercial de la serie en beneficio de las ventas de libros? Por supuesto, pero no a esos precios. Gigamesh copará las listas de los más vendidos durante semanas gracias a este lanzamiento y no necesita incrementar sus precios porque venderá libros durante una buena temporada. Los fans de la saga son incondicionales. Pero si Gigamesh persiste en una política de precios poco razonable con los tiempos de crisis que nos está tocando vivir y desvinculada del mercado digital, es posible que lo que consiga sea provocar rechazo entre los lectores españoles e impulsar a muchos a la lectura en lengua original. Como sucede con las series de televisión norteamericanas. ¿Por qué no?
Referencias
La imagen es de wfabry y está en Flickr.